NUEVA YORK._ El indigente dominicano Randy Rodríguez Santos, de 24 años de edad, quien es acusado de asesinar con una barra de metal a cuatro desamparados, dejando un quinto grave, la madrugada del sábado en el Barrio Chino tenía 14 arrestos previos, incluyendo cuatro en 2018, dijeron los investigadores.
 |
NUEVA YORK._ El indigente dominicano Randy Rodríguez Santos, acusado de asesinar cuatro desamparados el sábado en la madrugada, con 14 arrestos previos, es conducido desde el cuartel 5 a la corte criminal de Manhattan. (Fotos fuente externa). en la avenida Clarkson en Brownsville
Fue acusado formalmente de los cargos ayer domingo y tendrá que regresar a la corte criminal el 11 de octubre.
El baño de sangre, lo ejecutó Rodríguez Santos a partir de la 1:49 de la madrugada.
Cuando era sacado del cuartel 5 en el Barrio Chino para llevarlo a la Corte Criminal del distrito de Manhattan, se negó a responder a reporteros que le preguntaron el motivo de los brutales homicidios.
Medios locales aseguran que a todos los muertos, entre ellos envejecientes de más de 50 años de edad, les fracturó los cráneos, además de otros golpes letales en diferentes partes de sus cuerpos.
Todos los desamparados muertos estaban durmiendo en una calzada cerca de la esquina las calles Bowery y Doyers, donde docenas de indigentes pululan por el día y pernoctan, algunos usando drogas y bebiendo alcohol.
El alcalde Bill de Blasio, quien solo lamentó los asesinatos, calificándolos sin sentido en su cuenta twitter, está siendo fuertemente criticado por los defensores de la seguridad pública, responsabilizándolo de hechos como este.
La policía dijo que el indigente dominicano ya tenía una historia de ataques violentos y aleatorios cuando supuestamente se acercó a sus primeras víctimas, dos desamparados dormidos uno al lado del otro en camas de cartón en la referida intersección.
Después de golpear a las dos víctimas en las cabezas con la pieza de metal de 15 libras y 3 pies de largo, Santos dejó a los dejó por muertos y buscó las otras víctimas, dijo la policía.
A la vuelta de la esquina en la calle East Broadway, atacó a otros tres desamparados dormidos, golpeándolos también en las cabezas.
Uno de los asesinatos fue capturado en un video de vigilancia, y un video adicional momentos después de los ataques finales muestra a Santos mirando atentamente hacia arriba y abajo de la acera mientras se dirigía hacia el norte con la barra de metal.
"Por la forma en que caminaba, parecía que estaba buscando más víctimas", dijo una fuente de la investigación.
Y llevaba la pesada barra de metal sobre su hombro.
La policía dijo que Santos golpeó a los cinco hombres sin hogar, uno de los cuales tenía 83 años, mientras dormían en las aceras desoladas del Barrio Chino, en la primera noche fría de otoño, que fue la del viernes.
El sobreviviente, que sigue en estado crítico en el hospital Centro Médico NewYork-Presbyterian / Weill Cornell, de 49 años de edad, fue también golpeado en Bowery.
La víctima fue trasladada de urgencia al Centro Médico NewYork-Presbyterian / Weill Cornell en Manhattan.
La policía esperaba interrogarlo tan pronto como se recupere, dijo el subdirector de la uniformada en el Norte de Manhattan, Michael Baldassano, en conferencia de prensa.
Nativo de la República Dominicana, Santos vivió con su familia en El Bronx cuando era adolescente, pero en los últimos años comenzó tuvo que vivir en refugios para personas sin hogar, y en las celdas de la policía.
Tiene 14 arrestos anteriores, cuatro de ellos del año pasado, dijo la fuente.
"Soy un tipo tranquilo, pero yo no juego", escribió el acusado en su perfil de facebook.
El incidente más desquiciado en su hoja de antecedentes penales es un ataque en noviembre de 2018 en el que Santos supuestamente saltó sobre un escritorio en una oficina en la calle 35 Este en Manhattan, agarrando a un hombre por el cuello y mordiéndole el pecho.
Ese caso fue sellado.
Ese mismo mes, Santos supuestamente golpeó al azar a un extraño en un tren de la línea Q que se dirigía al norte de Manhattan, cerca de la calle Canal en el Barrio Chino.
Cuando el extraño le preguntó de qué estaba hablando, Santos lo golpeó en el ojo derecho.
Su arresto más reciente fue el 13 de mayo, por golpear a otro hombre sin hogar en el refugio en la avenida Clarkson en Brownsville, donde vivió recientemente.
En marzo, manoseó a una una mujer de 19 años en Jamaica, Queens.
En febrero, fue arrestado por robar en tiendas.
Fue acusado asalto y resistencia al arresto desde finales de 2017 y principios de 2018, dijeron fuentes policiales.
Presionado para obtener más detalles, Abraham solo decía que Santos era propenso a pelear: “Se me acercó. Me probó pero no quería hacer nada".
En cuanto a las víctimas, conocidos y policías las describieron como no violentas y se sabe que frecuentaban el Barrio Chino.
![](<hr style="color: #0056b2;" /><img border="0" data-original-height="300" data-original-width="1600" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhIIc7dASvdh5XfFV2H8ZoNi8cNOekNUs0DEagyoeHUojkJGKa1goAHuEGjlr6re2RKaJxuiUJsCpbZJYd-U9gGfqIc17pAmpeT53ZL2KPjfkCt3Suk6kqd9MSEYvKddEAl4cCK1yX9-pBMJaO5KzDyZGItCuHWb8qL1viNd4ZLJZbuYk7Yme7jL9OrWA/w400-h300/SNOW%201.jpg" width="1600">)
NUEVA YORK._ La indigencia que pulula en las calles de la ciudad refleja una estampa del subdesarrollo en la primera potencia del mundo que se verifica cotidianamente especialmente en sectores empobrecidos. En la foto, un indigente duerme en la cuadra de las calles 176 y 175 en el Alto Manhattan. (Foto Miguel Cruz Tejada / 12/12/2021).
.
NACIONES UNIDAS, Nueva York._ Republica Dominicana fue uno de los 141 países que vota por la resolución aprobada por la ONU en la que el conglomerado multilateral rechaza la agresión contra Ucrania.
En la foto el embajador de RD ante la ONU, José Blanco.
Donald Trump, saldrá de la Casa Blanca el 20 de enero 2021 con una imagen parecida a esta, con el lienzo que durante cuatro años pisoteó violando su propio juramento y la constitución para convertir a Estados Unidos en una vergüenza para el mundo. I see you never.
NUEVA YORK._ Estos inmigrantes siguen confinados en una cárcel de Texas a pesar del alto riesgo de morir contagiados por COVID-19.
0 Comentarios